Me quedé en shock, mirándola sin saber cómo reaccionar. ¿Un bebé? La noticia me llenó de una alegría indescriptible, entonces tome a Samantha en mis brazos y la empecé a besar diciéndole que me avía hecho el hombre más feliz y le dije a Samantha que siempre estaría con ella amándola y respetandola hasta el fin del mundo. Y ella con lágrimas en los ojos dijo que me amaría siempre. Después de un tiempo, de la emoción inicial una oleada de preocupación me invadió. Mi familia ya había hecho las cosas difíciles para nosotros, y ahora esto me preguntaba ¿cómo reaccionarían? Ante está noticia.
No pasó mucho tiempo antes de que la noticia llegara a oídos de mi madre. No sé cómo lo supo, pero me llamó de inmediato. Esta vez, su tono era completamente diferente.
Me dijo "Hijo, necesitamos hablar", su voz sonaba más suave, casi suplicante. "Quiero enmendar las cosas. No debí decir lo que dije sobre Samantha. No fue justo. Pero… un nieto… siempre he querido un nieto. Podemos hacer las paces, ¿no?"
No podía creer lo que estaba escuchando. ¿Ahora quería arreglar todo solo porque Samantha estaba embarazada? Algo en su tono no me convencía. Decidí no responder inmediatamente y colgué. Después de colgar le mencioné a Samantha que estaba a mi lado, lo que mi mamá avía mencionado. Samantha respondió que ya no intentaría presionarme a arreglar las cosas con mis padres, y dejaría que yo me hiciera cargo de la mejor manera posible. Y aunque tenía cierto interés en intentar arreglar las cosas con mis padres, eso cambio totalmente cuando resivi cierta información que me enfureció.
Esa misma noche, mientras hablaba con uno de mis primos, él me soltó una verdad que me hizo arder de rabia. Mi primo dijo "¿Sabías que tu madre y tus hermanas querían sabotear tu relación con Samantha?", "Quieren que volvieras con Rachel, tu ex. Diciendo que ella era la 'adecuada' para ti."
Y muy independiente de como hubieran terminado las cosas entre ustedes, tu madre decía que ella era mucho mejor opción para ti. Y como recientemente Rachel avía vuelto a la ciudad tu madre la invitó a su casa para ponerse al día y abogar por ti, y según oí llevan mucho tiempo en contacto con ella.

Cuando oí eso, No pude evitar sorprenderme no podía creer que estuvieran en contacto con Rachel.. La misma Rachel que me había engañado y destrozado el corazón. No podía creerlo. Todo este tiempo, mientras yo intentaba construir una vida con Samantha, mi madre y mis hermanas estaban conspirando para que yo volviera con una persona que me había traicionado.
La rabia que sentí fue indescriptible. Recordé las veces que mi madre me había hablado bien de Rachel, incluso después de nuestra ruptura, como si el engaño nunca hubiera ocurrido. Incluso cuando le pedí que ya no lo hiciera lo sigo haciendo. Y ahora, sabiendo que estaban intentando activamente destruir mi relación con la mujer que amaba, todo encajaba.
Después de refunfuñar un tiempo en silencio,
Samantha notó mi mal humor y me preguntó qué me pasaba. Decidí contarle todo. Ya que No había secretos entre nosotros, y ella tenía derecho a saber.
Samantha me escucho sin interrumpime, cuando termine de hablar. Dijo Intentado consolarme "Lo que importa ahora es que estamos juntos y vamos a formar una familia", yo siempre estaré dispuesta a intentar dialogar con tu familia. Pero ya no rogare más ni intentaré forzarte a que arregles las cosas con ellos. Ahora usaré toda mi energía y mi concentración total, en nosotros y nuestro bebé que viene en camino. Cuando termino de hablar no podía estar más de acuerdo con Samantha, Pero yo no podía dejar de pensar en lo que mi familia había hecho, en cómo habían intentado manipularme e intentar destruir mi relación.
Las semanas pasaron, y Mi madre seguía intentando contactarme, sabía que ella quería que le diera otra oportunidad. ¿Pero cómo podía confiar en alguien que había intentado sabotear mi felicidad solo por su banal prejuicio y una retorcida idea de lo que era "mejor" para mí?
El dilema era claro: seguir adelante con Samantha, con nuestra nueva familia en camino, y la intención de intentar reconciliarme con mi familia que me había traicionado en los niveles más profundos. Avía pasado a segundo plano. Y mientras veía a Samantha acariciar su vientre, supe que la decisión correcta sabía que talvez no sería fácil, pero sabía que no estaba solo en esto.

Pasaron semanas desde la revelación del embarazo de Samantha y el intento desesperado de mi madre por enmendar las cosas no desistia. Pero yo no le hacía caso, ya que para mí estaba Claro que en ella no avía ningún arrepentimiento. Días despues gracias a una tía descubrí: su verdadero motivo para querer arreglar las cosas conmigo Descubri que no lo hacía por amor mi. O ni porque tuviera un arrepentimiento genuino por sus palabras, hacia Samantha. sino que lo hacía por el miedo a cómo la gente la percibía. Ya que desde que la familia supo que le hizo a Samantha la Criticaron mucho y según mis familiares mi mamá perdió muchas amistades,
Y por eso ahora era tan insistente conmigo porque que todo se trataba de mantener las apariencias. Pero en si está información ya no me importaba ni me sorprendía.

Mis hermanas también había intentado acercarse en varias ocasiones. Resivia Sus mensajes, que eran fríos, distantes, casi automáticos. Y aunque quería a mis hermanas y quería estar bien con ellas. Ya que antes de todo esto siempre aviamos sido muy unidos. No podía ignorar el hecho de que trataron de Sabotear mi relación. Y tenía la sensación de que solo estaba siguiendo el ejemplo de mi madre, intentando limpiar la imagen familiar para no quedar mal frente a la familia extendida y los pocos amigos que les quedaban. Ya que Después de todo, nadie quería ser visto como el villano en una familia unida y perfecta… o al menos en apariencia.

Mi padre, por otro lado, había sido diferente. Después de aquella confrontación inicial, se mantuvo en silencio durante un tiempo, probablemente reflexionando sobre todo lo que había ocurrido. Una tarde, recibí una llamada suya que no esperaba.
Cuando contesté el hablo muy suave y dijo. "Hijo, sé que lo que pasó no tiene excusa. He estado pensando mucho y… no puedo decirte lo mucho que lamento haber sido parte de esa conversación. Me equivoqué, y no puedo cambiar lo que dije, pero sí puedo intentar ser mejor."
Su tono era diferente. No había en él la urgencia de mi madre ni la frialdad de mis hermanas. Había dolor y, lo más importante, arrepentimiento genuino. No estaba intentando salvar las apariencias ni ganar puntos con la familia; simplemente estaba reconociendo su error como un hombre. Y Eso me hizo pensar.
En los días siguientes, me sumí en una profunda reflexión. Sabía que no podía simplemente volver atrás y fingir que todo estaba bien. Sabía que Mi madre y mis hermanas habían cruzado una línea que podía tolerar. Incluso si me pedían perdón, sabía que no cambiarían. Ellas me an demostrado todo lo que llevan por dentro y su interior está podrido. Para ellas, todo se trataba de cómo los ven los demás, de mantener la fachada de una familia perfecta. No les importaba realmente mi felicidad, ni la de Samantha, ni la de nuestro futuro hijo. Solo querían salvar su reputación.
Una noche, mientras Samantha y yo estábamos acostados, le hablé sobre lo que estaba pensando. Ella, como siempre, fue mi roca, apoyándome sin intentar influir en mi decisión.
"Haz lo que creas que es mejor para nosotros y para nuestra familia", me dijo, acariciando suavemente su vientre. "No importa lo que decidas, siempre estaré a tu lado."
Fue en ese momento que supe lo que tenía que hacer.
Unos días después, invité a mi padre a tomar un café. Quería hablar con él en persona, lejos de las influencias de mi madre y mi hermana. Cuando llegó, noté que estaba nervioso, como si temiera que la relación entre nosotros estuviera a punto de romperse definitivamente.
El hablo primero y dijo."Hijo, no quiero que pienses que estoy aquí para defender a tu madre o a tus hermanas. Solo quiero que sepas que estoy dispuesto a hacer lo que sea para ganarme tu confianza de nuevo."
Lo miré a los ojos y respiré hondo antes de hablar.

"Papá, te agradezco que hayas sido sincero conmigo y que hayas reconocido tu error. Eso es más de lo que puedo decir de mamá y de mis hermanas. Pero necesito que entiendas algo: no puedo perdonarlas. Sé que nunca cambiarán. Todo lo que hacen es para mantener las apariencias. Y yo no quiero esa toxicidad en mi vida, ni en la de Sam, ni en la de nuestro hijo." Si vamos a empezar de nuevo tu y yo por favor mantén en todo momento a ellas fuera de nuestras conversaciones.

Mi padre asintió, con tristeza en sus ojos, pero sin sorpresa.
"Lo entiendo. No te voy a presionar ni abogare para que las perdones. Solo quiero que sepas que estaré aquí para ti, para tu familia, siempre que me necesites."
Cuando vi a mi padre deprimido no pude evitar entristecerme, ya que mi padre siempre a sido un hombre muy noble y me pregunte cómo fue que mi padre acabo con mi madre. Y recordé que la hermana mayor de mi papá siempre avía odiado a mi madre hasta el día de su muerte, ella siempre dijo y no le importa decirlo enfrente de varias personas que mi madre era una víbora que se avía aprovechado de mi padre y ahora empiezo a creer que tenía razón.
Despues de que yo que yo y mi papá nos despedimos. Sentí una pequeña chispa de alivio. Aunque las cosas con mi madre y mis hermanas nunca volverían a ser las mismas, ni tenía interés de hacerlo de nuevo, sabía que al menos con mi padre había una oportunidad de reconstruir algo, basado en el respeto mutuo y en el entendimiento. No sería fácil, pero estaba dispuesto a intentarlo.
Cuando volví a casa esa noche, sentí que una carga se había levantado de mis hombros. Miré a Samantha, quien me recibió con una sonrisa cálida y reconfortante, y supe que había tomado la decisión correcta. Mi prioridad ahora era mi futura esposa y nuestro hijo, no las expectativas superficiales de una familia que nunca me entendería.
Después de varios meses la relación con mi padre volvió hacer la misma e incluso mejoro.
Ya que ahora que voy a ser papá le pido más consejos que nunca. Y un dato interesante a mencionar, es que mi padre se está divorciando de mi mamá. Y aunque creí que estaría triste en realidad lo e visto más feliz que nunca, cuando le pregunte sobre su razón el dijo que ya avía aguantado 29 años de toxicidad y que ahora quería descansar sin sentirse agobiado. No discutí con el y le mostré todo mi apoyo y el me agradeció con un gran abrazo, y me dijo que ahora éramos el y yo contra el mundo y nos abrazamos más fuerte.
Y si se preguntan cómo está mi madre, pues decir que está mal es que darme cortó. Porque desde que mi papá le pido el divorcio a estado hecha un desastre, ya que esto no se lo esperaba. Y está sufriendo más porque no tiene el apoyo de la familia ni de sus amigos. Solo le quedan mis hermanas ya que al igual que mi madre tampoco tienen a nadie.
Pero no tengo tiempo para pensar en ellas ya que mi padre y yo estamos muy ocupados armando una cuna para mis bebés que van a nacer en unos días. Si se preguntan porque digo bebés pues resulta que Samantha va a tener gemelos.