·   Cuando venga a tu mente o a tu corazón la tentación de la arrogancia y de la jactancia entonces un buen remedio para ahuyentarla es presumir o recordar las cosas que te pesan y que te avergüenzan, y veras entonces como la arrogancia y la jactancia de ti solas entonces se alejan.

·   Es preferible confesar y enmendar los pecados delante de Dios aunque sea vergüenza delante de los hombres, que ocultarlos para tener gloria de los hombres pero a su vez tener vergüenza delante de Yahvé.

·   Paradójicamente la persona más ignorante es la que mucho sabiendo no conoce como saber, cuando alguien puede ser arrogante en el arte de ser patético y pedante en lo que sabe.

·   Que no te engañe la falsa moral de la mujer o de la persona que se hace respetar con quien no le atrae ni le interesa, o con quien nada sienta que pueda llegar a ganar, porque la verdadera moral la tendrá la mujer y la persona que siempre se hace respetar sea con quien sea su honor y su moral para no pecar.

·   Valora a la mujer y a toda persona que a la tentación, al pecado, a la perversión y a todo lo que se oponga a Dios le diga que no, tenle paciencia aunque en su afán de hacerlo pueda hacerlo al principio con vos. Valora a la persona, valora a la mujer que se hace respetar en el nombre de Yahvé.

·   Después de haber hecho un acto que estuvo bien no lo arruines con el mucho hablar o diciendo algo que mejor hubiera sido el haberlo callado, porque mucho bien se puede empañar con el mal de las palabras de más por torpe o por vulgar vanidad.

·   Cada vez que hagas bien a los demás trata de hablar tan solo para darle gracias y gloria a Dios por lo que pudiste lograr en tu corazón.

·   No es de persona justa el estar ansioso por decirle a una persona adiós, porque aunque mal ella se comporte, aunque valla por malos caminos, aunque sea lo justo el hecho de hacerlo, no es justo ni correcto el hecho de que hallas de desearlo, porque con pena deberías hacerlo lamentándote de que esta persona no sea amiga ni hermana en el camino que en Dios a toda persona la haría salva.

·   Es preferible apenarse por alguien de más, que pecar por el hecho de no preocuparse por quien debimos haberlo hecho.

·   Claro está que como Cristianos a nadie debemos despreciar, mas también está claro que como personas al pecado que hacen las personas es a lo que debemos despreciar.

·   Es un requisito casi sinequanom el hecho de sufrir desvalor y desprecio por seguir uno el camino de Dios, en especial cuando uno lo sigue verdaderamente sin el engaño de ninguna religión, mas esta es y debe ser una consecuencia y no una búsqueda, porque no son justos los que son simplemente despreciados sino los que por el hecho de hacer justicia es que como cruz el desprecio en sus espaldas es que están llevando.

·   No todo el que sufre es justificado, porque muchos sufren el merecido castigo y las consecuencias de sus terribles pecados.

·   No todo burlado y despreciado a Dios se está acercando, porque de los ridículos también la gente se burla y muchos imbéciles y criminales también son despreciados.

·   Aunque se burlen de él quien se reúne con burladores y con escarnecedores, en realidad lo hace de sí misma un mofa la misma persona, cuando conscientemente sabe con quién se sienta, será que de sí mismo es de quien se estará mofando al dejarse burlar.

·   Jamás puedes ni debes ser amigo de quien se burla o desprecia tu persona, tus valores, tus motivos y tus razones, porque ni siquiera el Cristiano debe hacerlo con ningún hombre y como lo haría alguna persona de ti en especial si tomando estás el camino de Dios en tu corazón.

·   No es malo tener un poco de amor propio cuando este es que te hace alejarte de personas que tan solo han de perjudicarte y en el camino de Dios hubieren siempre de estorbarte.

·   Perdona a quien te hace mal, perdona a quien te ofende más nunca los hallas de justificar o tú también entonces es que de cómplice pecarás.

·   Perdonar puedes a quien te hace mal y a quien te ofende, pero perdonar a quien a otro le hace mal y a quien a otro ofende no se puede, porque perdonar tú ni nadie, solo Dios y la persona ofendida es que pueden.

·   No es por ser soberbio sino que es para no ser perverso el hecho de preferir sentir pena y dolor antes de sentir odio y rencor por quien un camino equivocado de pecado es que hubo tomado.

·   Quien se aleja de los que hacen y siguen el pecado, si confiando está en Dios a buena gente que lo quiera de verdad es a donde será llevado tarde o temprano.

·   Se tienta a sí mismo quien está con personas que lo incitan a pecar en contra del camino que nos enseñó el Señor Jesucristo.

·   Dicela Bibliaque es preferible cortarse una parte del cuerpo antes de que este entero sea echado en el infierno de la muerte del fuego eterno, así es preferible seguir el camino de Dios aún en soledad que estando acompañado, solo sea para caer todos juntos en la muerte o en el abismo que no tiene final.

·   Es preferible perderlo todo en este mundo antes de perder el amor y la fe en Dios en nuestro corazón, porque paradójicamente quien conserva al menos solo esto todo lo tiene si es que así lo siente.

·   Antes de pretender ganar es necesario primero aprender a perder, pasara que luego entonces sí puedas estar preparado para que en justicia y en humildad puedas llegar a ganar.

·   Acepta las cosas que Dios te halla de dar y las cosas que te halla de quitar, porque de no hacerlo la justicia y la voluntad de Dios será lo que habrás de negar. Cree y confía en Yahvé y todo de un modo o de otro será entonces para tu bien.

·   Cuando recuerdes algo malo de tu pasado no basta con que reniegues o de este solo te lamentes, porque lo que debes hacer es arrepentirte de lo malo que hiciste ayer. Mas no reniegues de tu pasado cuando este no encierra maldad ni pecado porque sino de lo que eres es de lo que estarás renegando.

·   Si es que hoy estás andando por el camino del Señor y sientes que fue Él quien en tu camino te guió, no llames a nadie más que a Él Pastor, Ungido, Mesías y Salvador, no llames a nadie Santo ni Padre más que a Yahvé, porque sino estarás negando la fe que supiste tener tan cercana como en el día de ayer.

·   Lo que en apariencia hoy pudo ser malo ten prudencia en que Dios de algo peor es que te pudo haber resguardado, acepta lo bueno y lo malo que Dios te está enviando porque sino de renegado es que estarás pecando.

·   Luchar debes en el día de hoy con las armas que en la vida te da el Señor, no es justa toda lucha ni el fin justifica los medios, porque conla Bibliamuchos roban camuflados, de hombres santos se disfrazan delante de muchas personas de hombres buenos quienes son viles y villanos en sus actos. No por predicar la verdad uno puede mentir para llegar a ese fin, porque delante del juicio de Dios solo se salvarán y justos serán quienes con justas armas y con correctos medios es que llegaron al fin de la justicia que Dios nos enseña en la Biblia.

·   De dos cosas puedes renegar o agradecer quien se siente pobre o apenado, dándole gracias a Dios por la riqueza de su corazón y por estar despojado en el mundo de la vanidad que lleva a las personas a la corrupción, o puede renegar porque no tiene las riquezas que anhela y porque le pesan ver en su alma que las cosas que tiene sean muchas o sean pocas no le llenan.

·   No es el gozo ni lo es el dolor termómetro medida para saber si alguien es bendito o castigado por Dios, porque muchos ricos en su riqueza hallan su eterna condena, y muchos enfermos de nacimiento si tienen amor y fe entonces ya tienen un pie en el reino de los cielos.

·   Quédate si es que te tienes que quedar, da algo si es que lo tienes que dar, mas de hacerlo no te hallas de lamentar, vete si es que te tienes que marchar, enfrenta lo que sea que tengas que enfrentar, mas trata de que al hacerlo no te halla de pesar, porque vale muchas veces más para Dios el espíritu con el que se hacen las cosas que el simple hecho de hacerlas.

·   Haz lo que Dios quiere que hagas y entonces lo correcto siempre harás.

·   Se justo contigo mismo y sigue el camino de Jesucristo, entonces para ser justo con los demás a ellos también es que les debes de predicar.

·   Hasta que alguien no viva en carne propia una situación no la podrá comprender de una forma completa, no comprenderá alguna sensación o algún sentimiento a menos que la pena, la alegría o el dolor no ahonden profundo en lo más recóndito de su corazón. Por eso es que en el sufrimiento y en el dolor de padecer en este mundo, es que se hallan la comprensión de aprender a valorar el reino y la bondad de Dios.

·   Para el amor ni para el dolor no hay teoría ni explicación, porque la vida sintiéndolas nos la enseña ambas cosas en el corazón.

·   Poco creo yo que aman los que mucho es que del amor hablan, cuando pierden tiempo hablando en vez de utilizar ese tiempo en los hechos que en verdad hubieren de expresarlo.

·   Nadie comprenderá ni aceptará verdaderamente la palabra de Dios a menos que la acepte con los sentimientos y con la fidelidad del corazón, porque no es una teoría o una política que se acepta con la razón sino que es un camino que guía al corazón.

·   No caigas en la soberbia ni en la vanidad de creer que en algún campo o en alguna materia sabes tú más que los demás, porque aunque fuese cierto el ser pedante no es un sentimiento correcto sino que es una simple y llana vanidad. Primero conócete a ti mismo y conoce a los demás, y entonces sabrás lo que de los demás puedes aprender o lo que a alguien con humildad les puedes enseñar, esa es la actitud que alguien que sabe y que ignora en la vida debe llevar.

·   Cuando te apartes del mal, no esperes recibir más honra ni más gloria que la de sentirte más cerca del bien y de la bondad.

·   No esperes que nadie en el buen camino te quiera seguir a ti, cuando es a Jesucristo a quien debemos todos seguir.