Kamala Harris, la vicepresidenta hija de inmigrantes que podría enfrentarse a Donald Trump. Así es su historia

La vicepresidenta Kamala Harris podría escribir una nueva página en la historia de Estados Unidos si consigue romper el techo de cristal con el respaldo de Joe Biden para ser candidata a la presidencia. Ya lo ha hecho al convertirse, en enero de 2021, en la primera mujer, la primera afroestadounidense y la primera persona de origen asiático en ser vicepresidenta del país.

Pero al igual que su jefe Joe Biden, Kamala Harris también es conocida por sus meteduras de pata y sus discursos llenos de palabras. Describió la IA (Inteligencia Artificial) como “una especie de cosa sofisticada” que “en primer lugar tiene dos letras” hasta un reciente error desconcertante cuando calificó las elecciones de 2024 como “las elecciones más importantes de nuestra vida”, las habilidades de la vicepresidenta como oradora han estado en duda durante mucho tiempo.

También confundió una vez a Corea del Norte y Corea del Sur, dijo erróneamente que 220 millones de estadounidenses murieron de Covid-19 y bromeó diciendo que las personas entre 18 y 24 años son “realmente estúpidas”. Y también tiene fama de juzgar mal una situación social y reírse en el momento equivocado, incluso una vez cuando le preguntaron sobre el destino de los desesperados refugiados ucranianos.

La vicepresidenta Harris está felizmente casada con el abogado de Los Ángeles, Doug Emhoff, pero ha sido de que su romance con el extravagante demócrata de California y primer alcalde negro de San Francisco, Willie Brown, en la década de 1990 (cuando él tenía 61 años y ella 31) también le dio a la carrera de la candidata presidencial el impulso que necesitaba para llegar a donde está hoy.

“Sí, puede que haya influido en su carrera al nombrarla para dos comisiones estatales cuando era presidente de la Asamblea. Y sin duda ayudé en su primera campaña para fiscal de distrito en San Francisco”, dijo Brown en 2019 a la madura edad de 86 años.

Ahora, si bien puede que sean rivales en noviembre, hace poco más de una década el propio Donald Trump donó miles de dólares a la campaña de reelección de Kamala mientras ella era fiscal general de California. El expresidente insiste en que será incluso más fácil derrotarla que Joe Biden y se ha referido duramente contra la vicepresidenta. “Ella es tan malditamente mala. Es tan patética”. También la ha llamado “tan loca como una pulga”.

Harris ha estado al lado de Biden desde que fue elegido como presidente en 2020, y después de su decisión de rechazar la nominación demócrata, ahora aspira a convertirse en la primera mujer negra en encabezar la lista presidencial estadounidense de un partido importante. Una vez vicepresidenta, dedicó su discurso de victoria a las mujeres que han luchado por la igualdad en el país.

En 2022, Harris defendió fervientemente el derecho al aborto, puesto en entredicho por la Corte Suprema. “Algunos líderes republicanos intentan usar la ley contra las mujeres. ¡Cómo se atreven! ¡Cómo se atreven a decirle a una mujer lo que puede o no puede hacer con su propio cuerpo!”, dijo.

Esta contundente declaración y la enérgica campaña llevada a cabo por Kamala Harris en todo el país durante el año pasado le han dado un nuevo impulso. Al comienzo de su mandato cometió algunos errores en temas sobre diplomacia e inmigración. Esto ya que una vez en el cargo, trabajó para frenar la migración ilegal, pero sus esfuerzos no detuvieron el movimiento de personas que abandonaban sus países.

Tampoco se avanzó mucho en el tema del derecho al voto, otro tema que formaba parte de la agenda de Harris. Cuando los republicanos limitaron el acceso a las papeletas de votación en varios estados, los demócratas carecieron de la fuerza necesaria en el Congreso para contraatacar a nivel nacional.

Harris finalmente se ganó un papel como la defensora más abierta de los derechos reproductivos de la administración después de que la Corte Suprema de Estados Unidos revocara Roe v Wade, el caso histórico que había garantizado el acceso al aborto en todo el país. Ahora surge la duda para los demócratas de si ella es la mujer indicada para derrotar a Trump en noviembre en medio de unas elecciones que lucen más que reñidas.

Con información de AFP.