El cruce fronterizo entre Ciudad Juárez, Chihuahua y El Paso, Texas
, se vio sumergido en un estado de caos debido a fallas en los sistemas de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos. Los problemas técnicos causaron un incremento significativo en las filas, llegando incluso a detenerse en algunos casos durante varias horas.
Desde la noche de ayer y durante todo el día de hoy, los cruces internacionales estuvieron saturados, con filas de peatones y automovilistas que avanzaban a paso lento. Respecto a esto, los usuarios han expresado su frustración, ya que lo que normalmente tomaba menos de una hora, ahora se ha convertido en una espera de hasta tres horas o más.
La caída en los sistemas afectó las revisiones, que se hicieron manualmente
El CBP ha indicado que, debido a la caída del sistema, estuvieron realizando las revisiones a las personas que pasaban la frontera de manera manual, lo que incluye la verificación individual de documentos. Esta medida, aunque necesaria, ha contribuido a la formación de largas filas en todos los cruces entre México y Estados Unidos.
Automovilistas y turistas, muchos de los cuales vienen del sur del país, han reportado tiempos de espera extremadamente largos. Lo que antes era un cruce de una hora, ahora apenas permite avanzar unos pocos metros en el mismo tiempo. Se estima que en algunos cruces, la espera habría llegado hasta las cuatro horas.
El caos en las aduanas duró casi 10 horas, afectando significativamente el flujo fronterizo. A pesar de contar con medidas de identificación de personas consideradas entre las más seguras del mundo, la caída del sistema ha demostrado las vulnerabilidades
y el impacto que pueden tener estos fallos en el tráfico fronterizo.
