Esta tecnología se perfila como la herramienta del futuro que reemplazará a las computadoras y los celulares, ya que ofrecerá una interacción más natural impulsada por la inteligencia artificial.
El punto ciego del sistema actual es que, además de poco intuitivo es perjudicial. Foto: Unsplash.
En un mundo donde las pantallas y los dispositivos móviles han sido fieles compañeros durante más de una década, surge un paradigma que promete revolucionar la forma en que nos relacionamos con la tecnología: la “computación ambiental”.
Esta innovadora tecnología pretende reemplazar a las PCs y a los teléfonos celulares, ofreciendo una interacción más natural y sin la necesidad de comandos o teclados. Tres compañías líderes ya mostraron dispositivos de vanguardia en este campo, marcando el inicio de una nueva era en la informática.
El concepto de “computación ambiental” se basa en la fusión de dispositivos conectados, inteligencia artificial, aprendizaje automático, datos y actividad humana para generar resultados de manera intuitiva. A diferencia de la tecnología actual, en la cual el ser humano se adecúa al dispositivo, la computación ambiental busca una interacción más armoniosa y simbiótica con el entorno.
Los celulares y computadoras podrían quedar desplazados en poco tiempo. Foto: Unsplash.
Según Jessica Lessin, editora de The Information, uno de sus pilares fundamentales es la inteligencia artificial generativa (IAG), la cual avanza a pasos agigantados y, según los expertos, hará que los teléfonos celulares sean obsoletos en un futuro cercano. En lugar de las frágiles pantallas de 7 pulgadas, los dispositivos de computación ambiental podrán ser un colgante, un wearable o incluso lentes, capaces de procesar información en tiempo real y utilizar sofisticados asistentes virtuales que anticipan las necesidades de los usuarios.
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Ejemplos de innovación: las empresas que implementan la “computación ambiental”
Un claro ejemplo de esta innovación es el Apple Watch y su función de detección de colisiones, que puede activar una llamada de emergencia sin la intervención del usuario. También existen termostatos inteligentes que ajustan la temperatura según la cantidad de personas en una habitación, todo de manera automática y sin necesidad de comandos.
La startup Humane, creada por ex empleados de Apple, presentó su producto estrella, Ai Pin. Se trata de un dispositivo autónomo con una plataforma de software basada en inteligencia artificial que se integra de manera sorprendente con la vida cotidiana.
Ai Pin puede resumir conversaciones, recomendar alimentos, escanear etiquetas y traducir idiomas en tiempo real. Este pequeño dispositivo proyecta una interfaz gráfica en zonas de la piel, como la palma de la mano, sin necesidad de una palabra de activación, ya que está siempre encendido.
El modelo de Magic Leap tiene un campo de visión diagonal de 70 grados, una resolución de 1.440 por 1.760 píxeles en sus pantallas y una tasa de refresco de 120 Hz. Foto: Unsplash.
Por otro lado, Sam Altman, el creador de ChatGPT, se asoció con Jony Ive, el diseñador detrás del iPhone, para dar forma a la próxima generación de la IA que sucederá a los teléfonos móviles. En lugar de competir con los celulares, buscan ofrecer los beneficios de la inteligencia artificial sin las restricciones de las pantallas actuales.
La empresa Magic Leap también realizó avances en el campo de la realidad aumentada con lentes diseñados principalmente para el ámbito profesional. Estos lentes permiten realizar reuniones virtuales, compartir objetos digitales y colaborar en proyectos de manera inmersiva.
Peggy Johnson, la nueva CEO y ex empleada de Microsoft y Qualcomm, presentó una segunda versión más próxima a las expectativas. La nueva versión ofrece un campo de visión más amplio, una alta resolución y potentes capacidades de procesamiento.
