La inteligencia artificial podría encarecer drásticamente los precios de la electricidad

La transición energética está ganando terreno a los combustibles fósiles. Lo estamos viviendo día a día, en los que las energías renovables no paran de batir récords de producción constantemente. Por primera vez, la proporción de energías renovables en la producción total de electricidad superó el 50%. Sin embargo, a pesar de estos avances, los proveedores de energía se enfrentan nuevos y persistentes desafíos. Así, el creciente desarrollo y creación de sistemas basados en la inteligencia artificial (IA) podría causar escasez de electricidad y aumentar los precios de la electricidad.

La IA es un tema de gran actualidad. Sin embargo, muchas personas en el sector energético aún no comprenden las exigencias energéticas asociadas con esta nueva tecnología. Desde la firma de inversiones Franklin Templeton Investments, se advierte sobre posible escasez de electricidad debido al gran consumo de la inteligencia artificial y, como consecuencia, un aumento en el precio de la misma.

La demanda de electricidad para el cómputo de IA es 30 veces mayor por servidor

Aunque la búsqueda de ubicaciones para centros de datos, la conexión a la red eléctrica y la instalación de sistemas de refrigeración se está resolviendo de forma relativamente sencilla, la capacidad de generación eléctrica podría convertirse en un problema a medio plazo.

Las innovaciones como la “computación en la nube” han aumentado considerablemente la demanda de electricidad de los centros de datos. Las estimaciones actuales de la demanda eléctrica para el cómputo de IA son 30 veces mayores por cada servidor informático, que en el caso de los centros de datos. Por ello se hace evidente que el aumento total de la demanda eléctrica representa un problema no solo para el ecosistema de IA, sino también para otros consumidores de electricidad.

Las estimaciones actuales indican que, debido a la creciente demanda de IA, Estados Unidos experimentará por primera vez en décadas un crecimiento de la demanda eléctrica de más del 3% en los próximos diez años. Satisfacer este aumento de la demanda ya sería una tarea complicada en circunstancias normales.

La transición global hacia energías renovables, simultánea a esta creciente demanda, complicará aún más la situación. La IA provoca un aumento drástico en la demanda de electricidad. La actual transición de combustibles fósiles abundantes, pero contaminantes a energías renovables como la eólica y solar, complica aún más las cosas.

Las empresas de Inteligencia Artificial influirán en los precios de la electricidad

Los principales actores en infraestructura de IA, como Amazon, Google, Microsoft, Meta y Oracle, no quieren esperar y están llevando los sistemas existentes al límite. No sorprende que el suministro de electricidad se esté convirtiendo en el principal cuello de botella para la expansión de los centros de datos de Inteligencia Artificial.

Los plazos para conectar las plantas fotovoltaicas a la red eléctrica son tan grandes que están complicando la aplicación de la energía solar a la IA. Es por ello que muchas de las empresas que trabajan en sistemas avanzados de Inteligencia Artificial están recurriendo a los PPA. De esta forma se aseguran el suministro eléctrico para sus ordenadores y centros de datos.

ClearBridge Investments, empresa especializada en gestión de activos, anticipa que este tipo de contratos para el suministro eléctrico aumentará, ya que asegurar el suministro eléctrico es crucial para estas empresas. Aunque las nuevas fuentes de energía renovable jugarán un papel importante, el uso directo de las fuentes de energía convencional conectará más rápidamente los centros de datos para Inteligencia artificial a la red eléctrica y aumentará la demanda de los recursos existentes.

Otro ejemplo de acuerdo de suministro de energía es el gigante Amazon. Sin embargo, esta multinacional no ha optado por las energías renovables, sino más bien lo contrario, ya que ha firmado un contrato con el operador de plantas nucleares Talen Energy para comprar más de 1 gigavatio (GW) de electricidad. Además, teniendo en cuenta el más que posible aumento de precios de la electricidad, lo ha hecho con un sobreprecio del 50% sobre los precios actuales de la electricidad.

Esta circunstancia va a perjudicar aún más el suministro de electricidad tanto para otras empresas de Inteligencia Artificial, como al resto de consumidores.

ClearBridge Investments advierte sobre un aumento galopante de los precios de la electricidad

Un aumento de la demanda con una oferta insuficiente lleva a precios más altos para los consumidores y empresas, quienes, indirectamente, están subsidiando los planes de IA de Amazon. Dado que todos los competidores de Amazon son conocedores de su acuerdo energético, se están preparando para acelerar su estrategia energética para el desarrollo de la IA. Esto va a provocar que se tense aún más la relación entre oferta y demanda de electricidad. Y como resultado, podría haber un aumento galopante de los precios de la electricidad en los próximos años.

Si se extraen cantidades significativas de electricidad de la red y ya no están disponibles para cubrir la carga base, los proveedores de electricidad se verán obligados a recurrir más a las energías renovables, entre ellas a la fotovoltaica para cubrir la demanda. Sin embargo, existe el riesgo de que estas no puedan satisfacer la demanda, por lo que podrían producirse cortes de electricidad, o que la transición dure más de lo previsto al necesitar de las centrales de combustibles fósiles.

Riesgo de crecimiento de la IA: es muy probable que aumenten los precios de la electricidad

Al igual que cualquier forma de conocimiento, la IA es intensiva en energía, y los inversores que creen que las innovaciones digitales son puramente deflacionarias podrían llevarse una sorpresa. Los precios más altos de la electricidad en mercados con infraestructuras de Inteligencia Artificial sobredimensionadas es el suceso más probable de ocurrir.

Los problemas de suministro eléctrico para grandes centros de datos para Inteligencia Artificial pueden estar subestimados por los inversores y representan un riesgo para el crecimiento de la IA y el rendimiento a largo plazo de muchas acciones que se benefician del entusiasmo por esta tecnología.

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