International Business Machines Corporation (IBM) es un nombre notable que ha logrado importantes avances en la computación cuántica a lo largo de los años. Por ejemplo, utilizando su “computadora cuántica Eagle de 127 qubits’, IBM ha podido resolver problemas complejos que durante mucho tiempo dejaron perplejos a los principales métodos clásicos. A pesar de los desafíos del ruido y los errores en los sistemas cuánticos, IBM pudo generar resultados precisos utilizando una técnica de “mitigación avanzada de errores” que se verificó ejecutando el problema en una supercomputadora tradicional para niveles más bajos de complejidad.
Desde que se lanzó su computadora cuántica Eagle, IBM ya ha desarrollado un sistema de 433 qubits conocido como ‘Osprey’ y se espera que pronto lance un sistema de 1,121 qubits conocido como Condor. Cada una de estas generaciones sucesivas mejora enormemente con respecto a su predecesora al tiempo que amplía la brecha entre lo que es posible con una supercomputadora tradicional. IBM afirma que,
“A medida que los procesadores cuánticos crecen, cada qubit adicional duplica la cantidad de complejidad espacial (la cantidad de espacio de memoria necesaria para ejecutar algoritmos) para que una computadora clásica simule de manera confiable circuitos cuánticos”.
Si bien las capacidades potenciales de una computadora cuántica no pueden replicarse mediante enfoques más tradicionales, IBM señala que no imagina un futuro en el que solo exista una. Más bien, la compañía anticipa que tanto las variantes cuánticas como binarias seguirán prosperando en casos de uso orientados específicamente a las fortalezas de cada una.
De cara al futuro, IBM ya ha anunciado su próximo gran objetivo en previsión de que sus chips cuánticos actuales “superen” la infraestructura utilizada actualmente. Este objetivo se conoce como ‘IBM Quantum System Two’; un sistema modular que tiene el potencial de soportar hasta 16,632 qubits.
Capitalización de mercado: $ 116.85B
Relación precio/beneficio (P/E): 65.7
Ganancias por acción (EPS): $1.97
En el momento de escribir este artículo, IBM se jactaba de las métricas anteriores y figura como “Compra” entre la mayoría de las principales empresas de inversión.
Intel es pionera en transistores de silicio para la informática tradicional. Ya sea una computadora de escritorio o una computadora portátil, es muy probable que, independientemente del factor de forma de la PC, haya utilizado una computadora con un chip Intel.
A medida que avanzamos hacia 2023, Intel ha forjado una estrategia clara, aunque divergente, para el futuro que involucra la computación cuántica. Aprovechando su experiencia existente, Intel está aprovechando su experiencia en la fabricación de transistores de alto volumen para desarrollar qubits de espín de silicio. Por ejemplo, Intel ha desarrollado lo que llama el ‘chip de control cuántico criogénico Horse Ridge II’ que, según se dice, mejora la integración, mientras que sus ‘criopondas’ permiten realizar pruebas de gran volumen.
Trabajando junto con otras empresas decididas a desarrollar computadoras cuánticas comercializadas, Intel también está haciendo su parte para ayudar. Actualmente, Intel cuenta con el chip spin qubit ‘Tunnel Falls’ como su oferta más avanzada hasta la fecha y es, “…poner el chip a disposición de la comunidad de investigación cuántica para impulsar avances en el campo”.
Capitalización de mercado: $ 138.89B
Relación precio/beneficio (P/E): -157.14
Ganancias por acción (EPS): $-0.68
En el momento de escribir este artículo, Intel se jactaba de las métricas anteriores y figura como “Compra” entre la mayoría de las principales empresas de inversión.
Desde Santa Bárbara opera la ‘AI cuántica’, una iniciativa de Alphabet, que es la empresa matriz de Google. El objetivo de la IA cuántica es, “…construir computadoras cuánticas escalables que permitan a la humanidad resolver problemas que de otro modo serían imposibles”.
Más allá de desarrollar el hardware, como el procesador Sycamore, para su propia versión de una computadora cuántica, Quantum AI de Google también pone a disposición un conjunto de software diseñado para ayudar a los científicos en el desarrollo de algoritmos cuánticos.
Capitalización de mercado: 1.54 billones de dólares
Relación precio/beneficio (P/E): 22.74
Ganancias por acción (EPS): $4.49
En el momento de escribir este artículo, Alphabet contaba con las métricas anteriores y figura como una “compra fuerte” entre la mayoría de las principales empresas de inversión.
La división de computación cuántica de Honeywell es un esfuerzo conjunto conocido como ‘Quantinuum’, en el que también participa Cambridge Quantum.
Se cree que Quantinuum continúa centrándose en aumentar nuestra comprensión de la “computación cuántica de iones atrapados”. Esta tecnología implica la utilización de iones atrapados en el vacío, que luego se manipulan mediante láseres, lo que permite que los iones se comporten como qubits.
Al igual que cada una de las empresas mencionadas anteriormente, Quantinuum espera que su diseño permita una alta precisión y, al mismo tiempo, cuente con capacidades de corrección de errores, cada una de las cuales es crucial para que las computadoras cuánticas lleguen a ser comercialmente viables.
Capitalización de mercado: $ 132.79B
Relación precio/beneficio (P/E): 21.84
Ganancias por acción (EPS): $7.70
En el momento de escribir este artículo, Honeywell contaba con las métricas anteriores y figura como una “compra fuerte” entre la mayoría de las principales empresas de inversión.
Si bien puede que no tenga el mismo reconocimiento de nombre que IBM, Intel y Alphabet, IonQ aún así ha logrado establecerse como un actor importante en el campo de la computación cuántica.
IonQ es conocido específicamente por su investigación sobre la “computación cuántica de iones atrapados”. Como se indicó anteriormente, este es un método que aprovecha qubits compuestos por iones individuales suspendidos y manipulados en el vacío.
Tal como están las cosas, se informa que IonQ ha desarrollado computadoras cuánticas a la par de las más poderosas del mundo. De hecho, su oferta más reciente se convertirá en la primera de su tipo en utilizarse en un entorno comercial. IonQ se jacta de eso,
“Una vez que las computadoras cuánticas sean lo suficientemente poderosas y estables, su poder computacional único resolverá problemas que cambian el mundo y que están más allá de las capacidades incluso de las supercomputadoras más grandes”.
La compañía indica que espera lograr este objetivo mediante lo que cree que es un enfoque mejor (iones atrapados) que los adoptados por muchos de sus competidores.
Capitalización de mercado: $ 1.92B
Relación precio/beneficio (P/E): -27.56
Ganancias por acción (EPS): $-0.36
En el momento de escribir este artículo, IonQ contaba con las métricas anteriores y figura como “Compra” entre la mayoría de las principales empresas de inversión.
