Tecnologia

OpenAI suma a su junta directiva a exdirector de la agencia de inteligencia de EEUU


OpenAI suma a su junta directiva a exdirector de la agencia de inteligencia de EEUU
OpenAI ha tomado cuestionables decisiones sobre los miembros de su junta directiva. (X)

Sam Altman, el CEO de OpenAI, dice estar “emocionado” por darle la bienvenida a Paul Nakasone a la junta directiva de la empresa que desarrolla proyectos de inteligencia artificial. Pero ese sentimiento no lo comparten quienes recibieron la noticia. El motivo es que el general retirado se desempeñó como director de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA, por sus siglas en inglés).

La NSA es reconocida por su trabajo de monitoreo, recopilación y procesamiento de datos a nivel global para labores de inteligencia y contrainteligencia, por lo que la presencia de uno de sus exdirectores dentro de las oficinas de OpenAI despierta preocupaciones por el uso que pueda darse a la información personal de usuarios de ChatGPT y su decena de funciones creadas por la empresa.

Nakasone es uno de los pesos pesados en guerra informática. Desde 2018 fungía como director de la agencia de inteligencia hasta que renunció en febrero de este año. Según el comunicado de OpenAI, “se unirá al Comité de Seguridad de la Junta, responsable de hacer recomendaciones sobre decisiones para todos los proyectos y operaciones”.

Participación de la Fundación Gates

OpenAI viene de enfrentar las renuncias de Ilya Sutskever, cofundador de la empresa, y Jan Leike, responsable de seguridad. Este último escribió en X un extenso mensaje como clara indirecta para la compañía y para Sam Altman:

Dejar este trabajo ha sido una de las cosas más difíciles que he hecho en mi vida, porque necesitamos urgentemente descubrir cómo dirigir y controlar sistemas de inteligencia artificial mucho más inteligentes que nosotros.

Construir máquinas más inteligentes que los humanos es una tarea intrínsecamente peligrosa.

OpenAI asume una enorme responsabilidad en nombre de toda la humanidad.

Si se añade que exempleados fueron amenazados si revelaban secretos de la empresa, el ambiente en OpenAI se torna aún más turbio. Quizás querer silenciar las críticas fue lo que llevó a hacer varios cambios en la junta directiva, aunque pueden no ser los mejores. Por ejemplo, además del general retirado de la NSA, también se incorporó Sue Desmond-Hellmann, exdirectora de la Fundación Bill y Melinda Gates. El cofundador de Microsoft no solo simpatiza con las ideas globalistas del multimillonario George Soros, sino que además ha asomado en varias ocasiones la posibilidad de una próxima pandemia.

Control del Gobierno sobre los datos 

La falta de supervisión sobre estas máquinas “más inteligentes que los humanos”, como las llamó Jan Leike, provocó que varios empleados firmaran una carta abierta a inicios de junio por daños potenciales de la inteligencia artificial y escasas medidas de seguridad. Más recientemente, fue el empresario Elon Musk quien rechazó la asociación de OpenAI con Apple.

Si bien no se niegan los beneficios que trajo consigo la inteligencia artificial para tareas como aprendizaje de idiomas, apoyo para personas invidentes u optimización de procesos complejos, también es una realidad que puertas adentro empresas como OpenAI están teniendo iniciativas de las que poco se conoce y que podrían afectar a los usuarios y su información personal.

Volviendo a la incorporación del general retirado Paul Nakasone, hay quienes aseveran que cualquier persona que utilice OpenAI en el futuro “solo debe comprender que el gobierno de EE. UU. tiene control operativo total e influencia sobre esta aplicación”, otros creen que es cuestión de tiempo para que salga a la luz lo que ocurre dentro de la compañía.



Source link

Related Articles

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Back to top button