Querer ser completamente anónimo en Internet puede ser visto como algo propio de criminales o de personas involucradas en actividades maliciosas, pero teniendo en cuenta la fragilidad de nuestra información personal en la red, expuesta a brechas y recolección por parte de cientos de empresas, es un interés legítimo querer pasar lo más desapercibido posible en Internet.
Si bien hemos comentado en otras ocasiones algunas herramientas como las VPN o el navegador Tor, así como hemos hablado de servicios alternativos de correo electrónico y otros frente los de las big tech que podemos usar, en esta ocasión vamos a tratar algunas soluciones más extremas que un usuario puede adoptar para dejar las mínimas huellas posibles en Internet, independientemente de los lugares a los que entre. Todo ello, teniendo en cuenta de que no dejar ningún rastro en absoluto es prácticamente imposible.
Antes de todo ello, puedes solicitar a Google borrar información sobre ti desde este formulario, y en caso de que quieras seguir usando tu misma dirección de Gmail o cuenta de Apple, deberías entrar en el apartado de aplicaciones y servicios de terceros vinculadas con «Sign in» de Google, Facebook o ID de Apple, para cerrar sesión en ellas.
Usar un teléfono desechable
Una opción ideal sería la de comprar un móvil que no sea ni Android ni un iPhone. Pero lo cierto es que es muy difícil llevar una vida normal en los tiempos que corren ya que, no solo para mantener conexiones con nuestras amistades, sino para poder mantener un trabajo, es necesario usar apps propias de un smartphone, como por ejemplo WhatsApp o Telegram. Aunque puedes optar por usar un dumbphone como teléfono secundario, lo suyo sería aprovechar el hardware que ya tengas sin tener que gastar más dinero.
En este sentido, puedes usar herramientas como la aplicación Burner: disponible para Android e iOS, te permite crear números de teléfono desechables, para poder eliminarlos cada cierto tiempo como si se tratase de una antigua cámara de usar y tirar. Ten en cuenta que no es gratis: su tarifa mensual cuesta 4,99 dólares.
Si, por el contrario, el dinero no es un problema, puedes optar por comprar un dispositivo móvil de fabricantes independientes o emergentes, como el teléfono UP Phone, diseñado con la privacidad en mente, sobre el que te hablamos en este artículo.
Cambia tu sistema operativo
Al igual que buscamos formas de escapar del ecosistema de Google o Apple en el móvil, también podemos salir de Windows o macOS para que estas compañías no recaben datos sobre nosotros. Comúnmente se entiende que un sistema Linux va a ser la mejor opción hoy día para asegurar la privacidad y ganar un mayor control sobre nuestra experiencia online, aunque puede conllevar adquirir conocimientos un poco más avanzados.
El sistema operativo gratuito Tails, por ejemplo, es uno de los mejores en cuanto a privacidad para el usuario. Es ideal, por ejemplo, para periodistas, políticos, u otras personas que manejen información sensible.
Realiza algunas comprobaciones
Una vez has escogido un sistema operativo o interfaz que, tanto en tu móvil como en tu ordenador, aseguren tu privacidad por defecto, hay algunos consejos y herramientas que pueden servirte al usar un navegador por Internet. Aunque usar el modo incógnito del navegador que uses no va a impedir que dejes huellas, es útil para evitar que el programa esté todo el rato solicitándote guardar contraseñas u otros datos que uses (en su lugar podrías usar un gestor de contraseñas).
Lo más importante es que tengas JavaScript desactivado, pudiendo usar extensiones como NoScript (esta solo para Tor) y ScriptSafe para activarlo y desactivarlo dependiendo de la web a la que entres (ya que en muchas será necesario usarlo para poder interactuar con ellas). Además, recuerda borrar el caché de forma regular. También puedes usar extensiones como Privacy Badger para evitar que los sitios web introduzcan rastreadores en tu navegador. De lo que se trata es de evitar las cookies lo máximo posible.
Finalmente, para ocultar tu dirección IP, la herramienta más cómoda va a ser una VPN. Podrás comprobar que tu dirección se ha anonimizado entrando en esta web y viendo si es capaz de obtener tus datos. También puedes usar los distintos apartados de la web BrowserLeaks para comprobar qué información de tu ordenador puede estar siendo compartida a través de tu navegador. Podrás comprobar si está quedando registrada tu ubicación, operador o proveedor de Internet, así como filtros de contenido o proxy. Otra herramienta para comprobar la seguridad de tu navegador es la de EFF, que te dirá si tienes un buen nivel de protección frente a rastreadores.
Por supuesto, el navegador más privado que puedes usar es Tor, tanto en versión web como en móvil. En cuanto al email, lo ideal sería que te hicieses uno nuevo mediante un proveedor de correo seguro (no Outlook ni Gmail), pero si quieres seguir usando uno anterior, puedes comprobar que no se haya filtrado desde esta web. De igual forma, podemos comprobar si nuestro teléfono se ha filtrado con esta plataforma.
