Algo que personalmente, me ha dejado marcado de por vida

Hola. No sé si podrás ver este texto porque a lo mejor no me ha dado tiempo a terminarlo, pero si lo estás viendo, te voy a contar 2 cosas raras que pasaron en mi colegio:

Sinceramente menos mal que ya pasé a 1ro de la ESO.

1° Relato, "Un gran susto":
Mi colegio tiene 3 plantas, la primera (donde está la "recepción" y las clases de infantil, la segunda (donde están de 1ro a 6to de primaria), y la tercera planta, donde están los baños y todas las habitaciones relacionadas con el director y mantenimiento. Resulta que un día, en sexto de primaria, me empezé a sentir mal, por lo que le pedí a mi maestro que sí podía ir al baño. Al final me dijo que si, y subí hasta el 3er piso. Todo transcurría normal, me había tomado mis medicamentos, había hecho mis necesidades… Pero cuando estaba recogiendo mis pastillas, escuche uno de los golpes más fuertes que oí en mi vida. Me asusté mucho, ya que pensaba que venía de otro baño, pero al revisar, no vi nada, por lo que asumí, que el golpe venia de fuera de mi colegio. Me equivocaba. Justo cuando salí del baño y miré a las escaleras, vi un reflejo rojo, por lo que me acerqué y vi a una niña (de 4to dd primaria creo) que se había caído de cabeza por las escaleras, y se la había abierto. Al parecer, nadie había oído el golpe, por lo que acabé llamando al director y se la llevaron al hospital de inmediato. Por si quieres saber la actualidad, la chica tiene una cicatriz por toda la frente.

2° Relato, "¿Qué había ahí?":
Este relato a diferencia del otro, ocurrió cuando yo estaba en 5to de primaria. Nosotros 2 veces a la semana, tomábamos la "merienda" en el teatro. Pues bien, yo me sentaba con un grupo de 5 chicos y 2 chicas a merendar, pero al lado nuestra, siempre se sentaba un grupo de 5 niños de sexto de primaria (actualmente en 2do de la eso). El caso es que al lado de esos chicos, terminaba el escenario, y había una bajada en la que en el final había una puerta que llevaba sin abrirse por más de 17 años (según mi director). Resulta que un día, un chico sin que nadie se diera cuenta excepto su grupo y yo, se acercó a la puerta, forzó la manilla y abrió la puerta. Después llamo a sus amigos y todos entraron sin que nadie se diera cuenta (excepto yo). Aún sigo recordando esa mirada que me hecho el último niño que entró, antes de que cerrará la puerta con el pestillo. Pasaron 2 horas, y su maestro seguía buscando a esos 5 niños. Yo tenía miedo y no quería decirle donde estaban, pero al final se lo conté. Bajé con el profesor y les dije donde estaban, pero no podíamos abrir la puerta , por lo que llamaron a lod bomberos. Estos, tardaron 8 minutos en abrir la puerta, y cuando entraron, me asomé a ver qué había, y vi una clase normal, pero con un pasadizo tan largo, que no veía el final. Después de 40 minutos, sacaron a 4 de los 5 niños. Esos 4 niños salieron con una cara muy aterrorizada, pero nunca acabaron diciendo nada de lo que vieron ahí dentro. Lo único que dijeron es que el que nunca fue encontrado, se separó un poco del grupo y luego emitio el grito más espeluznante que oyeron en sus vidas. La ultima vez que entré a ese cuarto, era una clase totalmente normal, pero con una librería en el hueco del pasadizo, la cual si pones tu oreja ahí, puedes oír viento pasando por detrás de esa estantería. A parte de eso, hay una leyenda más falsa que el amor de ella, que dice que todos los días a las 3am el niño que no fue encontrado gruta ayuda (se lo invento un niño de 2do de primaria. Cuando hablabamos con el director de ese tema, se ponía muy nervioso y ponía la excusa de que antes este colegio era un hospital psiquiátrico.

No creo que te lo hayas leído todo, pero hasta donde lo hayas leído, gracias, de verdad.