Este 21 de septiembre se celebra el WIRED Summit 2023, que tendrá lugar en Expo Santa Fe, Ciudad de México. Se darán cita algunas de las personalidades más importantes de la ciencia, la tecnología, la educación, la divulgación y el mundo empresarial para discutir sobre innovación, medio ambiente, movilidad, inteligencia artificial, comunidades digitales y más. El WIRED Summit 2022 tuvo una gran aceptación y este año llegaremos aún más lejos. Este año te presentamos la mesa ‘Inteligencia Artificial Generativa: ¿Podemos regular el futuro?’. Claudia del Pozo, fundadora y directora de Eon Institute, modera el panel donde se busca ofrecer una perspectiva técnica, social y legal sobre la IA en el mundo y América Latina.
“La IA generativa se volvió mundialmente conocida por ChatGPT, lo que hizo que todos volteáramos la ver a la inteligencia artificial y preguntarnos cómo cambiará el futuro del trabajo, los derechos de autor y la ética alrededor de esta tecnología”, dice Claudia del Pozo. “Esta panel se va a enfocar en qué es la IA generativa, cuáles son los retos, qué tan confiable es, cuáles son los sesgos y cómo se puede regular”.
La inteligencia artificial generativa ha ganado mucha atención y reconocimiento en todo el mundo. Su capacidad para generar texto coherente y contextual ha sido sorprendente y ha abierto nuevas posibilidades en diversos campos, pero también ha planteado importantes cuestionamientos éticos y legales. La adopción de inteligencia artificial en diversas industrias puede tener un impacto significativo en el empleo. Mientras que algunas tareas repetitivas y rutinarias pueden ser automatizadas, también se espera que la IA genere nuevas oportunidades de trabajo, especialmente en áreas relacionadas con el desarrollo y mantenimiento de sistemas de inteligencia artificial.
En este panel, participarán Jonathan Mendoza Iserte, Secretario de Protección de Datos Personales del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), para ofrecer una perspectiva aterrizada sobre lo que se está haciendo en México y cuáles son los retos actuales en el país. En 2018, México fue uno de los primeros 10 países del mundo en presentar una estrategia de Inteligencia Artificial (IA) que buscaba establecer bases para el aprovechamiento de ésta tecnología desde la esfera pública.
Marisol Flores Garrido, quien estudió matemáticas aplicadas, tiene una maestría en cómputo científico en la Universidad de British Columbia y un doctorado en ciencias computacionales en el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica. Sus intereses de investigación se centran en el aprendizaje automático, el análisis de redes y la intersección entre la inteligencia artificial y las humanidades.
Manuel Pliego es Vicepresidente Inteligencia Artificial en CANIETI y lleva asuntos gubernamentales en Microsoft. Desde la Vicepresidencia de IA de CANIETI ha impulsado un Manifiesto sobre la IA, para que las empresas en México promuevan un diálogo abierto y ético sobre el tema para poner al ser humano en el centro.
El uso de la IA generativa plantea desafíos en términos de propiedad intelectual y derechos de autor. Dado que estos modelos pueden producir contenido original, surge la pregunta de quién es el propietario de dicho contenido y qué derechos tienen los creadores de la IA. La ética es un aspecto fundamental en el desarrollo y uso de la inteligencia artificial. La IA generativa puede ser utilizada para crear contenido engañoso o malicioso, lo que plantea preocupaciones sobre la desinformación y la manipulación.
También participa Frida Ruh, fundadora del Podcast AI is the New Sexy, que se transmite en múltiples plataformas de streaming, abordando las implicaciones de la Inteligencia Artificial en diversas industrias y contextos.
El año pasado, los algoritmos mejoraron mucho en la generación de ilustraciones, arte y escenas fotorrealistas. ¿Y ahora a dónde vamos? ¿Al video?
Es importante que los avances en la inteligencia artificial estén acompañados de una discusión global sobre políticas, regulaciones y marcos éticos sólidos. Esto aseguraría que la IA genere beneficios para la sociedad en general y que sus aplicaciones se realicen de manera ética y responsable. La colaboración entre los expertos en IA, legisladores, académicos y la sociedad en general es fundamental para abordar estos desafíos y aprovechar el potencial positivo de la inteligencia artificial generativa.